Fallece el mítico carpintero Francisco Bailac González a los 61 años de edad. Fue el autor de toda la carpintería de nuestro paso de misterio, realizando un excelente trabajo al darle forma a un diseño lleno de capillas y cartelas que obligaba, por sus entrantes y salientes,  a la realización de numerosos ingletes. Fue un trabajo compliacdo ya que el canasto, con aires de retablo, seguía unas líneas arquitectónicas. Esto hizo que, ya desde el trabajo de carpintería de Bailac, nuestro paso de misterio llamara la atención.

Natural de la localidad de Camas, aprendió de su padre, el también ebanista Francisco Bailac Cenizo (1917–1983), prolífico y destacado autor de pasos procesionales, con el que trabajó desde 1968, realizando la carpintería de los pasos de la Soledad de San Lorenzo, la Presentación al Pueblo, el Cristo de la Sangre, la Estrella, la Hiniesta, Las Cigarreras, Los Gitanos, el Duelo del Santo Entierro, Santa Cruz, Jesús Despojado o los Servitas. Lugo continuó su carrera junto a su socio Jesús Sánchez Arias en la calle Castelar, taller que ha mantenido hasta la actualidad.

Bailac trabajó con algunos de los grandes imagineros y tallistas del siglo XX, como Luis Ortega Bru, Dubé de Luque, Lourdes Hernández, Fernando Aguado o Juan Manuel Miñarro López, así como tallistas de la talla de Antonio Martín, donde participó en la carpintería del retablo de la Virgen del Rocío en la aldea almonteña.

De sus propias manos salieron la carpintería de 60 pasos repartidos por todas las provincias andaluzas. Destacan los pasos del Sagrado Decreto de la Trinidad o el de María Auxiliadora de Triana. Fuera de Sevilla destacan los pasos de la Coronación de Espinas, La Paz o el Prendimiento de Córdoba; el Monte Calvario de Málaga, la Vera Cruz de Cádiz, el Cristo del Amor de Jerez o el Prendimiento y la Cena, de Almería; o el del Santo Entierro o Los Afligidos, de San Fernando.

Muere así uno de los grandes ebanista de Sevilla, que le dió forma a una buena colección de grandes pasos.